Explainer
¿Cómo afecta la ganadería al cambio climático?
Clima•9 min read
Explainer
Si bien hay muchas causas de la deforestación, una de las principales es la ganadería.
Palabras de Grace Hussain
Los bosques son algunas de las áreas con mayor diversidad biológica del planeta, al albergar una amplia variedad de diferentes especies de flora y fauna. Desafortunadamente, los bosques están siendo destruidos innecesariamente, llevándose consigo los hogares de miles de especies únicas de animales, insectos y plantas que dependen de ellos para sobrevivir. Por fortuna, hay medidas que podemos tomar para reducir la deforestación.
La deforestación es el desmonte y la reutilización permanente de tierras que alguna vez fueron bosques. Hay muchas razones por las cuales una área puede experimentar deforestación, tales como la tala o la expansión urbana. Para entender la deforestación, es de ayuda distinguir entre un bosque secundario y un bosque primario. Un bosque primario es aquel que ha alcanzado madurez. Estas áreas están llenas de flora y fauna y son extremadamente ricas en diversidad biológica. Los bosques secundarios, por otro lado, son aquellos que han sido perturbados. Por ejemplo, un bosque secundario podría ser una área que se está recuperando de ser utilizada para el pastoreo de ganado u otra actividad humana, o una que actualmente está siendo destruida. Ambas son diferentes de las áreas con cobertura arbórea, una categoría que incluye otras áreas cubiertas por árboles, incluidos los parques locales y las granjas de árboles de Navidad.
Una de las principales causas de la deforestación es la agricultura. En todo el mundo, la expansión de las tierras agrícolas es responsable por el 90% de la deforestación, incluidos los cultivos para el consumo humano y animal, así como la tala de bosques para el pastoreo de animales. Por sí solo, el pastoreo representa el 40% de la deforestación.
Los cultivos creados para alimentar a los animales son otra causa de deforestación. Criar animales para comida es una fuente extremadamente ineficiente de calorías, pues cada caloría de carne de res requiere 25 calorías para producirla. Incluso el pollo, el producto cárnico más eficiente en calorías, requiere 9 calorías de alimento por cada caloría producida. Debido a esta ineficiencia, se requieren vastas extensiones de tierra para producir comida para los millones de animales sacrificados cada año, tierra que, en muchos casos, alguna vez fue un exhuberante paisaje forestal lleno de vida.
En Suramérica, tres cuartos de la deforestación se atribuye directamente al pastoreo de animales en granjas. Entre marzo del 2019 y marzo del 2021, solo una empresa cárnica, JBS, fue responsable por 100,711 hectáreas (o aproximadamente 389 millas cuadradas) de deforestación en los bosques amazónicos y serranos de Brasil. Hasta 74,701 hectáreas de esa área podrían haber sido taladas ilegalmente según Mighty Earth.
El desmonte de tierras para el pastoreo de animales de granja representa aproximadamente el 40% de toda la desforestación. Esto significa que si 15,000 millones de árboles son talados cada año, 6,000 millones de ellos son talados para pastoreo.
Cada día, más de 41 millones de árboles son talados como resultado de las actividades de deforestación.
Cada año, se pierden 15,000 millones de árboles en todo el mundo. Sin estos miles de millones de árboles y los bosques de donde provienen, millones de animales pierden sus hábitats y los ecosistemas se ven amenazados.
Aunque hay muchas causas de deforestación, hay algunas que encabezan la lista.
Encabezando la lista está la agricultura industrial, y la agricultura industrial animal tiene un impacto particularmente negativo. Gran parte de la deforestación que ocurre en las zonas boscosas más sensibles e importantes del mundo se debe al pastoreo o a la cosecha de cultivos como la soja, que se utilizan para alimentar a los animales hasta que son lo suficientemente viejos y grandes como para ser faenados.
Se estima que cada año se talan unas 380,000 hectáreas de bosque para satisfacer la demanda de madera. Esta madera es usada para una variedad de propósitos, incluyendo la construcción de viviendas y otras estructuras. Además, la tala representa el 60% de la degradación forestal. La degradación es el deterioro gradual de las áreas boscosas que no resulta en una deforestación completa.
La creciente demanda por minerales también está llevando a la industria minera a destruir los bosques.
Los incendios son una parte natural del ciclo de vida de muchos bosques ya que despejan el camino para que crezca nuevamente más joven y pequeño. Sin embargo, la frecuencia, gravedad y alcance de los incendios forestales que tienen lugar actualmente son extremos.
La ampliación de la infraestructura, particularmente con el uso de técnicas como la tala y quema, también está provocando la deforestación. La expansión de la infraestructura ocurre en una serie de industrias y poblaciones, incluyendo las personas que huyen de las zonas urbanas, las ciudades que invaden tierras boscosas, la expansión de tierras agrícolas, la minería y otras actividades madereras.
La selva amazónica ha sido protegida por décadas en Brasil, pero en el 2018 el gobierno debilitó las protecciones ambientales que cubren los 1.5 millones de millas cuadradas de la Amazonía. Esto llevó a un aumento de la deforestación y la degradación a causa de la agricultura industrial, las empresas madereras y otras industrias que buscan obtener ganancias.
Algunos de los países que experimentan la peor deforestación en el mundo incluyen a Honduras, Nigeria y Filipinas. Honduras experimentó una disminución del 37% de sus bosques entre 1990 y 2005. La mitad de Nigeria solía estar cubierta de árboles, pero ahora cerca del 90% de esos árboles han sido talados. Y solo un 35% de los árboles que alguna vez cubrieron Filipinas permanecen en pie.
Los bosques son algunos de los ecosistemas con mayor diversidad biológica de la tierra. De hecho, solo la selva amazónica es conocida por ser el hogar de más de 10,000 especies diferentes de escarabajos, el 15% de todas las especies de aves y mariposas, 427 especies de mamíferos y 378 especies de reptiles. La deforestación compromete los frágiles ecosistemas que estas especies llaman hogar.
Los bosques maduros almacenan grandes cantidades de CO2 en los árboles, sus hojas y el suelo. Cuando se produce la deforestación, este CO2 se libera de nuevo a la atmósfera. Recientemente, los científicos han llegado a la conclusión de que la selva amazónica ha pasado de ser un sumidero de carbono a ser un emisor de dióxido de carbono.
En el 2008, los investigadores calcularon que la deforestación era responsable por el 12% de las emisiones de CO2, pero esto no refleja la aceleración de la deforestación y las revisiones al alza de sus emisiones que se han producido desde entonces.
La deforestación interrumpe el ciclo del agua en la medida en que reduce la cantidad de evapotranspiración (evaporación del agua de las hojas, la tierra y la superficie de las plantas) que es crítica para la continuación normal del ciclo del agua. Sin este proceso, los patrones de precipitación cambian, lo que puede ocasionar sequías.
La pérdida de bosques significa la pérdida de raíces que mantienen el suelo en su lugar y ayudan a prevenir la erosión. La deforestación también reduce la salud del suelo y la cantidad de agua que puede retener, lo que hace que las inundaciones sean más probables.
El impacto que la deforestación tiene en los animales es inmensa. Cada día se pierden alrededor de 135 especies de plantas, animales e insectos debido a la deforestación, según un reporte publicado por Scientific American. Las especies amenazadas incluyen el águila arpia, el orangután de Sumatra y el koala.
Hay muchas soluciones políticas que han sido implementadas con el fin de frenar la deforestación. Estas políticas se dividen en tres categorías diferentes:
Adoptar el veganismo es una de las mejores formas de reducir la contribución de cada persona a la deforestación. La agricultura es responsable por el 90% de la deforestación, gran parte de la cual se convierte en tierra para cultivar alimento para los animales o en tierra para pastar. Reducir, y eventualmente eliminar, la ingesta de carne, lácteos y otros productos de origen animal, las personas pueden reducir drásticamente cuánto contribuyen con la deforestación.
Volverse una persona vegana es una de las formas más impactantes de apoyar los bosques y reducir nuestra contribución personal a la deforestación. Al elegir comer alimentos de origen vegetal, estamos renunciando a productos cárnicos ineficientes en calorías que requieren grandes cantidades de tierra y otros recursos para su producción. Elegir comer más alimentos de origen vegetal también puede tener un profundo impacto al alentar a quienes te rodean a tratar de incorporar alimentos libres de productos animales en sus vidas. La situación de los bosques y de todas las criaturas que dependen de ellos, incluidos nosotros mismos, es grave, pero si actuamos ahora cambiando nuestra dieta, todavía hay esperanza de un futuro lleno de bosques sanos y fuertes, llenos de vida y abundancia.
Este artículo ha sido actualizado.